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24/6/09

Galerie in der Mühle.... thitz@t-online.de
Galeria Jordi Barnadas.... barnadas@retemail.es
Rafael Romero....drrafaelromero@yahoo.es

RAFA ROMERO

RAFA ROMERO
Badalona, 1967.

Doctor en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona.

Profesor de Técnicas, Materiales y Procedimientos Pictóricos. Facultad de Bellas Artes. Universidad de Barcelona.


CURRICULUM ARTÍSTICO (1987-2009)


EXPOSICIONES INDIVIDUALES.

1987.- Sala de Exposiciones Ayuntamiento de El Clot (Barcelona)
1988 .- Galeria Trade Art. Barcelona.
.- Galeria Piscolabis. Barcelona.
1990 .- Galeria Arcs&Cracs. Barcelona.
1991 .- Galeria Ad-Hoc. Vigo.
.- Galeria Norai. Pollença. Mallorca.
1992 .- Galeria Arcs&Cracs. Barcelona.
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
1994.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
.- Galeria Sant Lluc. Olot (Gerona).
1995.- Gallery Schuster. Gelnhausen (Alemania).
.- Gallery Schuster. Offenbach (Alemania).
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
1996.- Galeria Jordi Barnadas. Barcelona.
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
1997.- Casa de Cultura. Sant Cugat (Barcelona).
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
1998.- Museu d'Art Modern de Tarragona.
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
.- Palacio Provincial. Diputación de Jaén.
2000.- Galeria Manifiesto. Barcelona.
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
2001.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
2002.- Arts Connections. Barcelona.
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
.- Thitz Atelier. Schornbach (Alemanya).
2003.- Arts Connections. Barcelona.
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
2004.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
2005 .-Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
2007.- Galería Jordi Barnadas. Barcelona.
2008.- Casa de Cultura “Les Bernardes”. Salt (Gerona).
.- Galería Joan Planellas. Tossa de Mar (Gerona).
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).

EXPOSICIONES COLECTIVAS.

1988.- Galería Trade Art. Barcelona.
1991.- Galeria Norai. Pollença. Mallorca.
.- Galeria Arcs&Cracs. Barcelona.
1992.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
.- Galeria Ad-Hoc. Vigo.
.- Galeria Arcs&Cracs. Barcelona.
1993.- Museo de Arte Moderno de Tarragona. Premi de Pintura Ricart Camí.
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemanya).
.- Centro de Arte Contemporáneo Piramidón. Barcelona.
1994.- Asociación de artistas Alemanes. Heidelberg (Alemania).
.- Gallery Schuster. Offenbach (Alemania).
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
.- Schorndorf Halle. Schorndorf (Alemania).
.- Bassler Gallery, Freiburg (Alemania).
.- Centro Cívico Can Felipa. Barcelona.
.- Centro de Arte Contemporáneo Piramidón. Barcelona.
1995.- Gallery Schuster. Offenbach (Alemania).
.- Galería Jordi Barnadas. Barcelona.
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
.- Centro de Arte Contemporáneo Piramidón. Barcelona.
1996.- Gallery Schuster. Offenbach (Alemania).
.- Mas Sant Joan. Flamicell. Albons (Gerona).
.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
.- Libros de Artísta. Facultad de Bellas Artes. Universidad de Barcelona.
1997.- Galeria Beida. Barcelona.
.- Gallery Schuster. Offenbach (Alemania).
.- Galería Marc 3. Barcelona.
.- Galería Lluciá Homs. Barcelona.
.- Centro de Arte Contemporáneo Piramidón. Barcelona.
.- Art Pofst. . L’Ille. (France).
1998.- Galería Marc 3. Barcelona.
.- Gallery Schuster. Offenbach (Alemania).
.- Centro de Arte Contemporáneo Piramidón. Barcelona.
1999.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
.- Colección de Arte Contemporáneo Museo Palau Novella. Barcelona.
.- Galería Marc 3. Barcelona.
2000.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
.- Artístas por el Tíbet. Museo Palau Novella. Barcelona.
2001.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
2002.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
.- Arts Connections. Barcelona.
2003.- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
.- Arts Connections. Barcelona.
.- Galería Esther Monturiol. Barcelona.
2004.- Arts Connections. Barcelona.
.- Galería Esther Monturiol. Barcelona.
2005 .-Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
2006 .- Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemania).
.-Galería Jordi Barnadas. Barcelona.
2007.-Galería Ismes. Vilanova i la Geltrú (Barcelona).
.-Galería Jordi Barnadas. Barcelona.
.- Galería Fivars. Montepego. Alicante.
.-Gallery In der Mühle. Schorndorf (Alemanya).
.- Claustre del Monestir de Sant Cugat. Premio Autocugat. Sant Cugat (Barcelona).
.- Sala d’Exposicions Caixa Layetana. Mataró (Barcelona). Bienal Ciutat de Mataró-Torres.García.
.- Amics de les Arts de Terrassa. Premios Calassanç. Terrassa (Barcelona).
.- Capella de Sant Joan. Premio Ciutat de Vilafranca de Pintura. Vilafranca (Barcelona).
.- Museu de Granollers. Premio “La Mútua”. Granollers.
2008.- Galería Jordi Barnadas (Barcelona).
.- Claustre del Monestir de Sant Cugat. Premio Autocugat. Sant Cugat (Barcelona).
.- Fundación Cuixart (Barcelona).
.- Fundación Balvi (Gerona).
.- Casa de Cultura de Salt (Gerona).

FERIAS INTERNACIONALES DE ARTE.

1990.- Interarte 90. Valéncia. Galería Arcs&Cracs.
1993.- Grafikmesse 93. Dresden (Alemania). Gallery Schuster.
.- Art Multiple 93. Düsseldorf (Alemania). Gallery Schuster.
1994.- Kunsrai 94. Amsterdam (Holanda). Centro de Arte Contemporáneo Piramidón.
.- Grafikmesse 94. Dresden (Alemania). Gallery Schuster.
.- Art Multiple 94. Düsseldorf (Alemania). Gallery Schuster.
1995.- Grafikmesse 95. Dresden (Alemania). Gallery Schuster.
.- Art Multiple 95. Düsseldorf (Alemania). Gallery Schuster.
1996.- Art Cologne 96. Kölhn (Alemania). Gallery Schuster.

OBRA EN MUSEO.

.- Museo Marugame Hirai de Arte Español Contemporaneo. Marugame (Japón).
.- Museo Palau Novella. Colección de Arte Contemporáneo.
.- Museo de Arte Moderno de Tarragona.

COLECCIONES Y PATRIMONIOS CULTURALES.
(Selección).

Colección Schemel de Arte Contemporáneo..
Colección Suñol de Arte Contemporáneo.
Colección Nau Ivanov de Arte Contemporáneo.
Colección Arce de Arte Contemporáneo.
Colección Valls de Arte Contemporáneo.
Fondo Patrimonial de la Generalitat de Cataluña.
Fondo Patrimonial del Ayuntamiento de Barcelona.
Fondo Patrimonial Ayuntamiento de Sant Cugat (Barcelona).
Fondo Patrimonial Excma Diputación Provincial de Jaén.
Fondo Patrimonial SPD. Partido Social Demócrata Alemán. Land de Baden Wüttenberg.
Fondo Patrimonial Asociación de Artistas Alemanes.
Fondo Patrimonial Consejo Español de Sastres.
Fondo Patrimonial Museo de Arte Moderno de Tarragona.
Fondo Patrimonial Museo Marugame-Hirai de Arte Español Contemporaeo. Japón.
Fondo Patrimonial Centro de Arte Contemporáneo Piramidón.

VIAJES DE ESTUDIOS ARTÍSTICOS.

Estados Unidos, Canadá, Portugal, Francia, Italia, Alemania, Reino Unido, Holanda, Bélgica, Chequia, Slovaquia, Polonia, Ukraina, Rusia, Turquía, Bulgaria, Marruecos, Sahara, Argelia, Siria, Egipto, Emiratos Àrabes Unidos, Qatar, Bahrein, Pakistan, India, Nepal, Tíbet, Bután, Bangladesh, Japón, Túnez e Israel.

Reflexiones icónicas-nómadas sobre el techo del mundo. North India &Himalaian Landscapes.

El artista nómada o la vocación redentorista del creador desde su mismidad hacia la pluralidad.
Nomadismo, alteridad y transposición.
Reflexiones icónicas nómadas sobre el techo del mundo.
North India & Himalayan Landscapes.

" Laúdes, cálices y perfumes, guedejas y ojos de almendra: juguetes que el tiempo arruina. Juguetes, austeridad, labor y meditación, soledad, plegaria y renunciamiento. Cenizas que el tiempo esparce,...cenizas."

Omar Khayyam. Las Rubaiyyat.


Tonos pesimistas no exentos de esperanza puesto que aún caben muchas tierras fértiles para el ser en su particular deambular por la existencia. La reivindicación, defensa y estudio del artista, pone de manifiesto su particular fenomenología en pro de una más que necesaria humanización nounémica. Este, se convierte en un luchador superador de obstáculos, un funambulista cuyo alambre es proceso de enfrentamiento con los demás, cuestionamiento del mundo, revulsión ante lo convencional, tránsito hacia la consolidación del ansiado hogar. ¿Cuántas veces fue tal alambre circense un simple proceso de huida contextual en dirección a otras culturas y sociedades mucho más reconfortantes que las propias. Viajes de enajenación de las múltiples y catalogables ignorancias, muy al contrario de cualquier ciudadano de a pié insistente en no someterse a los dictados de la conciencia, el alma, espíritu o como bien se le quiera llamar. Mas bien mecidos en la convención por la mano ajena y anónima del paradigma. Épocas sistematizadas y compartimentadas en la fenomenología neoliberal globalizadora y deshumanizadora, épocas de ética light. Épocas en las que aquellos que se atrevan, por el contrario, a hacer una defensa de la emotividad como vía resolutiva, resultarán sentenciados como locos por la sociedad que los contiene, aunque en ocasiones, su atrevimiento sea bañado por las mieles del éxito y sean elevados a la categoría de héroes.

Naturaleza emotiva y heroica del artista que exento de cuadratura, rebelde en cuanto a que lucha por no ser ensartado en la vara del despropósito, este, manifiesta no obstante, una dicotomía existencial: la de sentirse sólo, alejándose y alienándose de la sociedad y a la vez viviendo la obligatoriedad de la relación con la misma, sin la cual no puede vivir.

Naturaleza autónoma de un artista que abriría infinidad de posibilidades estéticas en el siglo precedente desde idealismos remodeladores en los márgenes del pensamiento y en la reflexión humana. Gurú de la doctrina de las cualidades del sentir, el artista manifiesta una incipiente axiología que le empuja bajo una idea dinámica y evolutiva a buscar valores nuevos intelectuales en su concepción del arte, valores que se alejaron y alejan de una razón servilista del proceso económico, lejos del proyecto esencial humano y en muchos casos convertida en pluralidad fruitivo-inaugural.
El artista en la modernidad, comenzó a ser reivindicativo junto al pensador de lo humano, meramente olvidado. Lejos de la burocratizada cotidianeidad, comenzó a rebelarse como parte del mercado y como fuerza laboral en un mundo entendido como conjunto de esferas de producción. Así devino paulatinamente un nómada en un complejísimo mundo contemporáneo, osado practicante de paciencia, que apostó por seguir buscando con su praxis creativa respuestas en el inconmensurable mundo de lo ignoto, atenuado por un contexto tan difícil de entender como practicar. Y ¿cuál fue y cual es su praxis?: combinar prolijamente más que nunca sus símbolos frutos de la emotividad, como improntas de su interioridad relacionales con el mundo externo.

Les propongo, entonces, con la gravedad de las palabras finales de la vida, que nos abracemos en un compromiso...Sólo quienes sean capaces de sostener la utopía, serán aptos para el combate decisivo, el de recuperar cuanto de humanidad hayamos perdido.

Ernesto Sábato.

Nomadismo utópico, ruptura con toda limitación, proyección y realización del yo. El artista nómada, busca una reterritorialización, un oasis exento de paradigmas, epistemes y concepciones. Pensamiento horizontal o nómada deleuziano, pensamiento que no se refugia en ninguna esencia, principio, fundamento o criterio de objetividad; lo que intenta es mostrar aquello que escapa al modelo ideal de la razón moderna. Individualista, ahistoricista, diferencial, ajerarquico y relativo, provocador y trasgresor en definitiva y enfrentado a los segmentos duros y rígidos de la sociedad tradicional e inmovilista.

Sustituid la anamnesia por el olvido, la interpretación por la experimentación. Encontrad vuestro cuerpo sin órganos, sed capaces de hacerlo, es una cuestión de vida o muerte, de juventud o de vejez, de tristeza o alegría. Todo se juega a ese nivel.

Deleuze-Guattari.

Alteridad del ser para refugiarse en irreales circunstancias creadas o buscadas. El refugio en el otro, envalentonamiento y lanzamiento en búsqueda de una ley moral propia. El artista se coloca en el exterior de su civilización y momento histórico para juzgarlos, valorarlos desde lo ajeno y lo distante. Idealizaciones de modelos de patrias paralelas y fantásticas, lugares más que para habitarlos, para asentar en ellos el alma.

Nunca se va tan lejos como cuando no se sabe dónde se va.

Oliver Cronwell.

El artista, capaz de leer los signos del universo desde principalmente una condición indiscutible, la de ser nómada, buscador, caminante, intelectualizador del mundo desde su intervención creativa, su crítica y su comunicación; se encamina a fabricar sueños y esperanzas, ya que puede ser realmente ejemplo esperanzador desde su idiosincrasia y mecanismos diversos hacia su malograda y desmotivada sociedad.

Es muy bueno mirar tu propia cultura a la luz de otras culturas. Tu propia lengua a la luz de otras lenguas. Siempre tu distancia te procura algo...la mirada periférica al medio es siempre más interesante que la del centro a la periferia.

Juan Goytisolo.

Así, entre muchas ejemplificaciones, desarrollan sus devaneos nómadas tantos y tantos protagonistas de esta tragicomedia. Así podemos recordar desde la emoción icónica, entre otros, a François Marius Granet, enajenado en lo procesual espacio-temporal, en el Coliseo Romano de 11838, trabajando con sus adminículos dibujísticos el paisaje rocoso y ruinoso evocador de las glorias pasadas. Héroes románticos obsesionados nómadamente en recorrer amplios espacios para liberar a su espíritu del asfixiante aire de la limitación, cómo Giacomo Trécourt en 1842 autorretratado vestido de oriental, o Vincent Van Gogh refugiado en la luminosa Provence de 1888, mientras Gauguin viaja por Tahití y las Islas Marquesas en una experiencia onírico-poética.

Ejemplos ricos y abundantes de la trasgresión nómada artística, como la vivida dialécticamente tras el encuentro de Derain y Vlaminck al descubrir la grandeza del arte africano en el Café de Argenteuil; la misma sensación vivida paralelamente por Picasso en el Museo Etnográfico del Trocadero que daría paso en gran medida al pasional y vanguardista cubismo. Emotividad incontenida ante lo ajeno como la experimentada también por Joan Miró en sus dos viajes iniciáticos al Japón. Viajes como los que relata magistralmente Hopper en su proceso aséptico y de síntesis de búsqueda del hombre desde sus soledades de tránsito nocturno por salas de espera de estaciones de autobús y moteles de carretera. La pasión por la filosofía del otro, en la magnífica búsqueda de valores ajenos pero a la vez próximos, como los encontrados por Tobey, Hartung y Rothko en el budismo Zen. La recurrencia a lo primitivo-chamánico en Beuys hasta llegar, sin olvidar a tantos, a los procesos reivindicativos marginales de fin de siglo en los que priva la importancia del otro a través de recursos tan controvertidos como el apropiacionismo y los procesos de fertilización mutua observables en Dossou Amidou, Zoé Leonard o Jana Sterback, por nombrar algunos.

Sueños constantes de viajero, referencias de cofrades activistas y ejemplificadores en mi obra, articulada también como un nomadismo diaspórico, de trasposición y alteridad. Paisajes como líneas vitales de flotación que recuerdan cómo es el continente del tedioso y a la vez esperanzado. El mundo en definitiva desde la ontológica vivencia del desplazamiento, la observación, la nota poética y antropológica. Escritos y libros de viaje que puedan humildemente ampliar este momento lacónicamente y particularmente robado por la brutal belleza de tierras lejanas, en esta ocasión el Asia que roza el cielo, el techo del mundo, las planicies y escarpados riscos himalayos, los que dotan al hombre de las gélidas aguas de la sabiduría primordial, que descienden como deidades fluviales a los fértiles valles de la India. Reflexiones icónicas nómadas con el anciano oficio del pintor, observador, meditador y escriba, como las líneas que abro desde el silencio reflexivo de mi ser y que merece la pena compartir con la humilde vocación del servicio, kilómetros de letras secretas que luego fraguan anímicamente en forma de dibujos y pinturas, muchos de ellos iniciáticos y ocultadores de enigmas como los que configuran esta serie que aquí y ahora queda presentada.



Algunos pensamientos escogidos del cuaderno de este ínfimo pintor, sobre Asia en general, y en particular sobre el techo del mundo y el Norte de la India.


Alguien excesivamente prejuicioso me dijo en cierta ocasión despectivamente que el sonido característico de la India era el escatológico carraspeo laríngeo-nasal acompañado de la expulsión flemática. Evidentemente, también sobre los diamante se depositan motas de polvo, lógicamente, aquel que observa lo superfluo y lo convierte en categoría es un tonto. Recordé que ese tipo de comentarios desde otras circunstancias pero en un similar sentido, ya las había leído en las crónicas que en 1298 Marco Polo dictó en la prisión de Génova a Ámese Rustichello de Pisa. En las mismas y desde aquel prepotente crisol de la cristiandad, relata sus andanzas por reinos lejanos desde valores preconcebidos no muy diferenciados de los de tropeles de turistas que atropellan actualmente los continentes alíenos cámara en mano extasiados por el regateo a los pobres e indigentes. Afortunadamente, hubo y sigue habiendo quien viaja al teatro del mundo con la honesta misión de minimizarse. Idealistas decimonónicos, soñadores germanos, poetisas británicas, flemáticos y hastiados hombres y mujeres soñaban encontrar en estas tierras de tantos dioses, su axis mundi, la fórmula que elimina todos los sufrimientos. Así llegaron a estas y otras tierras por mí tan amadas y así siguen llegando y llegarán. Y se encontrarán desnudos ante el universo, vestidos por el agua monzónica y peinados por la fresca brisa himalaya. ¡Namasté!, ¡namasté!, ¡loanzas a la deidad que llevas dentro!, ese es el sonido de la India, el saludo de sus habitantes a la más preciosa y sutil joya del hombre, su mente y su capacidad potencial de elevarla desde la practica de las virtudes a otra categoría indescriptible e inexplicable. ¡Tashi delek!, ¡tashi delek!, así lo hacen los tibetanos, deseando al Buda que todos llevamos dentro, los mejores deseos.

A Asia se debe ir desnudo y con la voluntad del reencuentro, con lo propio y natural, con lo inexplicable. En estos océanos de sistemas de creencias, las energías celestiales y terrenales se cruzan revigorizándolo todo, haciendo aflorar la regeneración y renovación de nuestra entidad, la misma indiferenciable en todo lo que siente y ama. De Colombo a Lahore, de Kabul a Tashkent, de Üruchi a Calcuta, de Yangon a Surabaya, de Beijing a Kobe, de Kajurano a Madurai, se extiende un verdadero e incontrolable universo de los sentidos. Los lugares sagrados, lugares causales, son universidades donde se erigen conocimientos inconmensurablemente simples: Paz, Amor y Compasión.

Cielo en la tierra donde chamanes, maestros, gurús, arahats, pandits, ngagpas, iniciados, recitadores de mantras, shadús, lamas, peregrinos eternos, curanderos tántricos, arquitectos cosmológicos, ascetas, invitan a parar el mundo y cuestionarlo con la dualidad de la vehemencia y el amor materno. Lugares donde la catarsis es de lo más placentera, descubriendo piedras inscritas que parecen inertes y que guardan secretos liberadores. Aquí, las aguas de los océanos cósmicos se deslizan suavemente por las laderas himalayas, mientras chinos y tibetanos litigan por la tierra, los santos protectores siguen haciendo caer sobre todos ellos, nosotros, gotas como diamantes, las mismas que se unirán para devenir tras bendecirnos con su fresco tacto, ríos con nombres sublimes, apellidos, diría yo de nuestro linaje de seres sintientes, Indo, Ganges, Tasangpo, Bramaputra, Irrawady, Yangtsé Kiang,...

Las poderosas aguas al liberarse generaron la madre de todo...de ellas surgió el único hálito vital que infundió vida a los dioses.

Rig Veda.

Un día de invierno, envuelto en esfumatos védicos, enfermé en Varanasi. Aquel día cambió mi vida, aquella tos seca y fiebre de fragua, significaba un desprecio profundo a los valores mundanos. Transmutación, las aguas del Ganges se llevaban lejos tantas inmundicias, los brahmanes recitaban sus poemas celestes, Suria, la deidad solar asomaba tímida. Sonaba música punjabi y se respiraba devoción y emoción, palimpsesto, dibujo sobre lo dibujado, inscripción sobre la inscripción. Lamparillas votivas flotantes, olor a té, a masala y a chapati. Perros y sarna, vacas famélicas vagabundas engalanadas por clavelinas naranjas. ¡Vienen dos muertos!, grita alguien; procesión, comitiva de muerte, dos cuerpos amortajados de blanco camino a los crematorios fluviales. Madera de sándalo para los ricos, espinos resecos para los pobres. Rúpias negras arrugadas en negras manos.

Individuos prisioneros de sus cuerpos y de sus mentes, fotografiando leprosos y comprando llaveros a los niños sin padres con agua del río sagrado. El templo es un cajero automático...

La naturaleza se desvanece y muere, se repliega, se esconde, deviene secreta y a la altura de lo iniciático, agua y aire, fuego y tierra, boda de rocas sagradas en Japón (Meoto iowa), vínculos en Tíbet a los esenciales que se esconden en la naturaleza a través de ofrendas dignas de dioses. Construcción de moradas terrenales a los ancestros en Thai. Árboles que son árboles, no madera en potencia. Árbol, principio no menos cósmico de vida que riza sus raíces aéreas cual ofrendas al aire. Aire que lleva por el universo las bendiciones de las estupas budistas, de las devocionales banderas de oración. Aire que enfría las tazas de té, que refresca los tazones de vino de arroz en los casamientos rurales, aire que desempolva las tumbas de los sabios antiguos, de los héroes compasivos. Aire que pasa por las celosías de los arcos conmemorativos, el mismo que refresca caldeadas sexualidades de vírgenes obligadas, el mismo que acaricia el asta sagrada, el embrión de oro, el templo del diamante, el árbol bodi, el río perfume, la escalera del cielo, el jardín de la iluminación, los ojos del compasivo, los hábitos azafranados, las sedas damasquinas, los paños remendados de algodón, las enaguas de las campesinas tendidas al sol. El aire, expande los humos purificadores de los incensarios, matando demonios locales. El aire, dispersa las neblinas matinales del techo del mundo, como dispersa nuestros pesares.

Esta Asia primordial, la de lo espiritual y lo piadoso, la de los pobres, la que protege con todas sus criaturas la sonrisa de Krishna, la que espera la llegada del iluminado sedente, la que recita mantras, la que lo perfuma todo, la que espera al arrepentido, la que espera a ciertos necios para que hagan de una vez retiros espirituales de tres o más años para dominar su ego y erigirse como victoriosos gurús, la que lo perfuma todo, esta, es mi tierra causal, por eso no puedo más que practicarla. A punto estuve tiempo atrás de dejar el mundo de los calzados y hacendosos una mañana fría de invierno. En ese lugar, Lumbini (Nepal), en tiempos antiguos nació Shidarta Gautama, el que se manifestaría en su plenitud como el Iluminado. Santa tierra guardada por santos hombres. Allí se abren muchos caminos, los que se ven y los que sólo algunos ven. Pude haber cogido ambos fácilmente, pero a mí siempre me ha gustado lo difícil, y lo difícil era seguir luchando en mi contexto, lejos de extremos, en mi casa mediterránea, con mi familia, mis pocos amigos y mis silencios artísticos. Honesta y compleja senda, motivación, que puedan servir esto trabajos y reflexiones como un granito de arena a esta playa infinita e impermanente, para dar satisfacción y beneficio a los demás.

Honestamente.

Rafael Romero.
Artista Visual y Plástico.
Doctor en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona.

Nomadismo, Alteridad, Transposición y Contraste como objetos de conocimiento artístico del mundo: "This is the World".

Presentació Crítica
Rafael Romero. Nomadismo, Alteridad, Transposición y Contraste como objetos de conocimiento artístico del mundo: "This is the World".


Me complace poder escribir la presentación de esta nueva etapa de Rafael Romero (Badalona, 1967), gratamente sorprendido ante el descubrimiento de toda esta nueva obra que titula sugerentemente en el lenguaje más internacional: This is the World, (Este es el mundo). Una prolífera serie de trabajos esta vez en técnica digital pensados para el mediano y gran formato con sutilidad en la presentación y en la conceptualización de los mismos.

Hacía ya algunos años que había perdido la pista de este artista, el cual conocí a raíz de varias exposiciones a mediados de los noventa en la red de Galerías Schuster (Frankfurt, Berlín, Geln-Hausen y París), en la Galería In der Mühle de Schornbach, su Galería en Alemania y sus trabajos como invitado en las acciones organizadas por la Asociación de Artistas Alemanes en la ciudad de Heidelberg en el verano del año 94. Trabajos, mayoritariamente pictóricos, todos ellos versando en torno a la idea de la recuperación de los valores primigenios del hombre desde el acercamiento al Otro y a sus culturas y pensamientos lejanos a la inmovilista idiosincrasia occidental. Una necesidad imperiosa para Rafael Romero. En ese sentido, recuerdo la facilidad por la teorización y el compromiso intelectual en el artista, en una larga conversación al respecto que me permitió hacerme una radiografía rápida y clara de su personalidad y en la cual, manifestaba sus numerosas fuentes y recursos en diversas áreas para defender una idea que sigue vigente en la actualidad sin haber perdido intensidad, más bien todo lo contrario, como señala el propio artista:

El artista es autoridad para cuestionar enérgicamente su hábitat, con el sano fin de mejorarlo para él y altruistamente para los demás. Y para ello, debe dirigirse a valores esperanzadores y humanistas, muchos de los cuales se encuentran en otras sociedades del pasado y el presente y en sus numerosos y variados valores.

Así, recuerdo a un artista conmocionado por el mundo que nos ha tocado vivir, pero a la vez esperanzado desde un voraz idealismo que me remitió a una definición Ad-hoc de artista realizada por Paúl Klee: El buen artista debe ser a la vez poeta, naturalista y filósofo.

Pensé que Rafael Romero, era sin duda un humanista cuya riqueza ideológica se hacía latente en su obra y dimensionaba desde lo sumativo, generando un resultado rico y de bella factura, observable en series como Casa de Fuerza, Symbolon, Istanbul o Namasté. Pinturas de referentes eclécticos, invitaciones al viaje hacia el Sur y el Este. Obras estética de ensoñación romántica llenas de introafección y poética.

Hacía unos años, como señalaba anteriormente, que apenas sabía gran cosa de la evolución de Rafael Romero puesto que el mismo había puesto en práctica una muy sana y revitalizante actitud, la de retirarse parcialmente del mundo. Tenía información de que había viajado mucho, en el anonimato más ascético con la intencionalidad de la vivencia como objeto de crecimiento, pues el viaje, para Rafael Romero, será por excelencia terapia para paliar el anhelo precisamente de lo lejano, de lo distante y de lo exótico. Un sistema ideal para trasladarse viajando hacia el otro, pues este es para él, profundo objeto de conocimiento: Asia Central, Oriente Medio, India, Nepal, Golfo Pérsico... También, sabía que se había acercado a experiencias llamémoslas espirituales o místicas desde su vocación por conocer la intimidad ontológica del individuo ante reflexiones como la muerte y la trascendencia. Experiencias que le acercaron a la sabiduría Sufí y a la vida contemplativa monástica del Budismo Tibetano y su praxis artística (Togyul), algo que me recuerda profunda y experiencialmente a Flauvert, Tobey, Schopenhauer, Nietzsche y Beuys entre otros. Igualmente, sabía que había desarrollado una magnífica Tesis Doctoral con reflexiones profundas sobre la emotividad y el nomadismo en la creatividad artística. Y además, que alejado del mundo del arte-sistema, sentía cierta comodidad en la practica de la pedagogía artística enseñando visualidad y plástica a niños y jóvenes en el sistema reglado educativo mientras devoraba decenas de obras literarias y filosóficas en todo este tiempo, en una enajenación voluntaria y para él depurativa.

Ahora, que he tenido la oportunidad del reencuentro tras este periplo y en el regreso de su exilio voluntario, he observado con frialdad teutónica esta última obra, diseccionándola, poniéndola a prueba dialécticamente interrogando a su artífice. Tras ello, puedo categorizar que me encuentro ante una obra mayúscula y excepcional y ante un auténtico Artista de Arte Contemporáneo comprometido con su tiempo.

Rafael Romero en su eclosión ha vuelto dispuesto a compartir, ahora desde una depurada retórica libre de excesos, su Nomadismo Diaspórico. Esto es una invitación al cuestionamiento de nuestro hábitat desde los sentimientos más profundos del hombre. Romero, se posiciona claramente en la praxis del deambular, del explorar y el improvisar. A pesar de vivir en una aldea cada vez más global, ha constituido un universo mental en el que prima la fragmentación y la escisión. Con una fuerte implicación ética e incluso política trabaja un arte deconstruido buscando el ideal de unión de lo estético con implicaciones extraestéticas como son la verdad, el bien y la solidaridad. El término Nómada, como ahora se autodefine artísticamente, plantea una ruptura con los paradigmas estipulados en las sociedades estáticas en las que vivimos, para reivindicar todas las culturas dinámicas del mundo y ese extraordinario proceso llamado mestizaje, que él define muy bien desde su particular manera de ser como proceso de fertilización mutua.

El mundo en definitiva, es visto por Rafael Romero como un foro permanente de cultura en el cual el artista deja de ser un ajeno y frío observador del mismo, para devenir ente activo y participante en su representación. Así su trabajo This is the World, no es más que un viaje de búsqueda intelectual de las ricas diferencias culturales del mundo. Una vez acotada la diferencia con precisión cientifista, a través de la ilustración y la experiencia, como haría Humboldt, se dirige a lo poético y ensoñado como hicieron Gauguin, Derain, Miró, Saint-Exupery, Borges o Stendhal ante lo que les aportaba el mundo de los otros para hacerlo latente sumando lo propio, creando numerosos contrastes y encuentros culturales en los cuales la imagen de la realidad se articula a manera de fotocomposición, mostrando personajes, lenguajes, símbolos e ideas pertenecientes a diferentes culturas y pensamientos del planeta. Su mirada, en gran medida antropológica, romantiza los iconos expuestos, eternizándolos mediante el recurso del contraste, algo propio de la naturaleza del mundo y su complejidad. La obra, deviene entonces un monumento sumativo de voluntades y a veces de contrariedades, bajo una apariencia de misterio que lleva irremediablemente a la conceptualización. Todo ello, no es más que el fruto de la agitada peregrinación vital del artista. Tal y como señala Pablo Neruda: La vida es una larga peregrinación que siempre da vueltas, que siempre retorna al bosque austral, a la selva perdida.

A partir del conocimiento de estos últimos trabajos, animo para concluir a Rafael Romero para que siga invitándonos con tan excelente exposición de propósitos a la reflexión con respecto a quienes somos y qué queremos en este complejo y curioso mundo, sistema en el que vivimos, subsistimos y sobrevivimos. Reconozco y confieso que hacía tiempo que la obra de un artista no me resultaba apasionante, al menos la suya, ha conseguido darme algo que yo personalmente le pido al arte, alimento mentis, alimentar mi mente. Gracias Rafael por el festín y por ayudarme a corroborar una vez más que el mundo y el hombre son obligados objetos de conocimiento no solo para el artista sino para todos nosotros.


Hamburgo, Marzo de 2005.


Hans Korsch. Crítico de Arte.

SELECCIÓN DE CRÍTICAS. 1988-2005

La Vanguardia 3/9/88. Galería Piscolabis. Barcelona. (Fragmento).

Rafael Romero se adentra en el ambiente portuario, tomando los barcos como motivo principal de sus composiciones y dando preferencia en su resolución al collage y a lo específicamente pictórico -específicamente el colorido- por encima del dibujo propiamente dicho. De este modo, las formas de proas, popas, chimeneas, cubiertas y puentes, simplemente se insinúan, como también las sensaciones que el autor trata de imprimir a su obra, las cuales van ligadas a la fantasía y al misterio que entrañan unos mundos lejanos con el sólo esos barcos pueden ponernos en contacto.

La Vanguardia 23/3/1990. Galería Arcs&Cracs. Barcelona. Mª Luisa Borrás. (Fragmento).
Se trata al parecer de un jovencísimo pintor, aunque denota un sentido de la plástica notable, en especial por la soltura con que maneja el color obtenido con diferentes técnicas pero en general con el recurso del collage...Una exposición memorable.



Revista de Arte Marte. Nº38, 1990. Galería Arcs&Cracs. Barcelona. (Fragmento).
Pintor versátil capaz de adaptar un mundo interior, inmensamente rico, y plasmarlo con toda la variedad posible de matices…Destaca en Rafael Romero su “…capacidad inconsciente de atacar directamente a nuestra esencia, a lo más profundo y lejano que hay en nosotros…”.


Revista de Arte Las Artes Crónica 3. Nº26, 1990. Galería Arcs&Cracs. Barcelona. José Luis Arce Carrascoso. (Fragmento).
Joven pintor de talento cuya actual iconografía se impregna de un sentido “marítimo”. Ello nos abocaría, inevitablemente a la irrelevancia. Por el contrario, como resulta que el “agua” es “principio de vida” y que frente al dominio exhaustivo de una razón inane, es voluptuosidad y riqueza, configuradora de formas infinitas, resulta que el principio originario que alienta a la obra de Rafael Romero es la del “agua”. Sus mundos son islas. Islas rodeadas por un espacio plano aludiendo, sin duda, a otros muchos esperados. Y en su interior, pregnante de romanticismo, un conjunto vibrante de formas que cabalga y tiembla sobre un fondo abismal.


Revista de Arte Arteguía. Nº57, 1990. Galería Arcs&Cracs. Barcelona. Isaac Ortízar. (Fragmento).
Existen ciertos artistas que están en permanente movimiento, viajando a la búsqueda de un nuevo espacio de aventura que les permita innovar, resentir que el arte está en todas partes, como la belleza. Rafael Romero es uno de estos artistas…Trabajo forzado y encadenado a la usura del tiempo anudado a los días y noches de viajes interminables en los mares y océanos del mundo. Los símbolos que se desprenden de los cuadros, se describen, con un tiempo; donde se descifra una música venida de lejos, la invención que habla de las visitas al puerto de Cádiz o Singapur, de Buenos Aires o de Hong-Kong. Imágenes sacadas de un inconsciente del tiempo que se mezclan al color, la arena, el óxido y la acumulación gangrenosa de las violentas intemperies.



Revista de Arte San Martín Informatiu. Nº0, 1990. Barcelona. Juanjo Oliva. (Fragmento).
Rescatar el mundo hacia el sur es la intención de Rafael Romero. Libre de conceptualismos que agobian, narrando historias, definiendo su compromiso social hacia la intimidad humana, camino de los orígenes que la sociedad actual descuida constante y aceleradamente. A esa sociedad que parece desatender la función del arte, ofrece su confianza Rafael Romero. El habla de paciencia, confía en que tal vez algún día la gran mayoría llegue a apreciar y a considerar el hecho artístico.



Texto de catálogo. 1991. Galería Arcs&Cracs. Barcelona. Eva sastre Forest. (Fragmento).
Así, mediante un conocimiento científico de la realidad, su obra es capaz de desafiar las leyes de la gravedad, inventar estructuras celulares, plasmar las visiones del subconsciente y recrear un mundo imaginario en el que el lujo, la sensualidad y el misterio recrean un paisaje propicio para el surgimiento de fenómenos transformadores, sin los cuales, tanto en arte como en ciencia, la síntesis final sería inalcanzable.

Diario 16. 16/2/91. Galería Ad-Hoc (Vigo). (Fragmento).
La introspección reflexiva y el deseo de expresión plástica por medio de elementos naturales, como puede ser el caso de la arena son los dos componentes básicos que plantea la pintura de Rafael Romero. Su trabajo como creador tiene mucho que ver con la alquimia y con la experimentación natural. Así hace sus propias pinturas a partir de pigmentos naturales respetando el valor sobre “el oficio” en el arte clásico y huyendo en gran medida de la frivolidad de algunos movimientos esteticistas contemporáneos.


Diario El Punto de las Artes. 17/9/1991. Galería Arcs&Cracs. Barcelona. (Fragmento).
Pinturas las de Rafael Romero que recogen enigmas del pensamiento, datos que aparecen como figuras cabalísticas en espacios tonales a modo de muros de consecuencia… Es un autor que viaja y vuela; viaja por geografías distintas donde el hombre ha dejado y deja el rastro de sus creencias, costumbres y sentimientos, y por territorios suyos donde abarcar puede todo el universo y lo que imagina sin limitación.


Diario Avui. 30/9/91. Galería Arcs&Cracs. Barcelona. Isidro Estévez. (Fragmento). Traducción del Catalán.
Su pintura es el rojo y el dorado, el pigmento y la arena. Su pintura es una reflexión íntima y profunda, un pensamiento que ha cobrado forma entre impresiones que se alejan de la realidad y texturas que juegan con materiales insólitos. Un universo pictórico absolutamente personal…Intenciones, ideas, formas, colores y materias con las cuales Romero juega con una idea clara: ¿qué necesidad hay de buscar a tu alrededor cuando dentro de ti tienes millones de cosas?. La introspección es necesaria. Hay que rechazar el mundo que nos rodea y rescatar cosas puras.


Diario El Mundo. 22/10/92. Madrid. Alfonso Sastre.(Fragmento).
Este pintor es como un torrente de belleza plástica, y tan es así que también yo lo digo, siendo como soy más sensible a un tipo particular de pintura figurativa y a la par extraña. Habladme de Hooper o de Antonio López y la fascinación se produce en mí naturalmente. Pero este Rafael Romero, es pintura. Solo pintura, nada más que pintura, nada menos que pintura.

Diario Schorndorfer Nachrichten. 2/5/93. Galerie in der Mühle. Schorndorf (Alemania). (Fragmento). Traducción del alemán.
Sus técnicas mixtas sobre papel muestran a un artista vagabundo del mundo, apátrida, puesto que ha asumido todas y cada una de las nacionalidades…Flores orientales sobre fondos azules llenando la estancia expositiva. Un excepcional artista.


Texto de catálogo. Abril de 1994. Galería d’Art Sant Lluc, Arcadi Calzada. Olot (Gerona). José Luis arce Carrascoso. (Fragmento).
Rafael Romero, pintor que ahora puede iluminarnos en una nueva etapa en la cual lo orientalizante mezclado con la huella de una singular religiosidad, consigue equiparar lo estético y romántico con una nueva dimensión mística. Con una temática narrativa del viaje y el sueño, mutuamente ligados, se abre una dimensión mágica que convierte lo santo en juego, y lo lúdico en sagrado.


Rhein Neckar Zeitung. 3/5/94. Heidelberg (Alemania). (Fragmento). Traducción del alemán.
El diálogo que desarrolla el artista español Rafael Romero con el artista alemán Thitz, en el marco del congreso internacional de artistas celebrado en nuestra ciudad, nos evoca el encuentro entre culturas en forma de 25 magníficas banderas colgadas estos días en la fachada del ayuntamiento.


Texto de catálogo. Febrero de 1996. Galería Jordi Barnadas. Barcelona. José Luis arce Carrascoso. (Fragmento).
El poema que Rafael Romero ha compuesto a lo largo del tiempo no tiene una única estrofa, ni una única vuelta. Lejos de arrinconarse en una monotonía obsesiva, ensaya con nuevas fórmulas por descifrar. Variedad y cambio se combinan con la progresión harmónica de una obra que evoluciona y se renueva constantemente. El resultado es un bello poema pictórico cargado de nostalgias. Con todo, no se trata de una simple añoranza por alguna cosa perdida de manera irreparable. No es la lánguida canción a punto de disolverse en un horizonte indefinido. El ayer del tiempo y la lejanía del espacio se transfiguran en nuestro “aquí” y “ahora”. Aquello que tan solo es un recuerdo, deviene, de golpe, proyecto vivo e ilusionado.

El Periódico. 23/3/96. Galería Jordi Barnadas. Barcelona. (Fragmento).
Para sumergirse en la atmósfera de un país, a veces, no es necesario haber viajado hasta allí. Una imagen puede transportarnos muy lejos. Una pintura puede evocar mil sentimientos. Rafael Romero nos acerca, a través de la exposición “ Estambul” al espíritu de la capital Otomana.





El País. 15/4/96. Galería Jordi Barnadas. Barcelona. Catalina Serra. (Fragmento).
“Me interesa conocer y estudiar la cultura del sitio. Ir al lugar y experimentar, mirar las cosas con lupa. Después, lo que he hecho es como un poemario, una experimentación que se sale momentáneamente del concepto general de mi trabajo, que me permite mostrar mis impresiones sobre este lugar”. “ Necesito respirar otras cosas, abrirme a diferentes experiencias. Para mí cada obra de arte es un mundo abierto y energético, por eso procuro que cada pieza sea totalmente diferente”. (Rafael Romero).

El Mundo. 22/4/96. Galería Jordi Barnadas. Barcelona. (Fragmento).

La variedad de la ciudad otomana representa la esencia de las inquietudes del artista, que construye un mundo de sugerencias procedentes de otras culturas.


El Mundo. 23/4/96. Galería Jordi Barnadas. Barcelona. Eva sastre Forest (Fragmento).

¿Qué es para usted el arte?: El eje de mi existencia. Es una lucha interna que me permite hacer un viaje introspectivo, casi medicinal. Es energía que quiere motivar a la gente y decirle: no hay que perder el tiempo, hay que ahondar en el conocimiento intelectual y popular. Extrañarse ante el mundo, y ante uno mismo.

Revista L’Arc. Abril de 1997. Barcelona. Ángel García. (Fragmento).

Probablemente, la idea que Rafael Romero tiene del artista, está a medio camino entre el héroe y el loco, por ser el único que se atreve a exteriorizar sentido estético y sentimiento, que todo individuo en mayor o menor medida tienen. Será por ello que el taller de este artista sea sobre todo un lugar dedicado a un trabajo profundamente intelectualizado.


Diari de Sant Cugat. 20/4/97. Casa de Cultura de Sant Cugat. Tatiana Blanqué. (Fragmento).
Siempre he pensado que el hecho de viajar es muy importante. Un viaje es como una buena película. Es necesario un tiempo para digerirlo y entonces es cuando verdaderamente te sientes satisfecho, lleno de nuevas vivencias. Bien, lo mismo pasa con una buena exposición. Con esta exposición de Rafael Romero, tenemos la oportunidad de poner en práctica el arte de preparar un buen plato.

El País. 8/5/97. Casa de Cultura de Sant Cugat. (Fragmento).
Reflexiones más que impresiones de sus viajes y de los sentimientos y estímulos que la gente, el paisaje, el olor a otros lugares, a veces exóticos, le han causado. Romero, pintor cerebral, explica que la obra debe transportar al espectador al viaje interior. Símbolos y signos atávicos de otras culturas.


Revista 4 Cantons. Abril de 1997. Casa de Cultura de Sant Cugat. Clara Roig (Fragmento).
“Seguramente, detrás de toda esta obra hay un hecho nostálgico que es real. Yo diría que es una nostalgia ontológica, una búsqueda de espacios como la que experimentaron los románticos. Yo pienso que después de esta vorágine de la postmodernidad, han de llegar nuevas formas de conocimiento; declara el propio artista”.

El Punt de Tarragona. 13/3/98. Museo de Arte Moderno de Tarragona. Antoni Salcedo. (Fragmento).
Rafael Romero, plantea una fusión en su obra del mundo antiguo y del mundo primitivo, de signos y símbolos tradicionales de cualquier pueblo con un tratamiento actualizado que, a veces, remite a los signos codificados de orientación o de tránsito.


El País. 26/3/98. Museo de Arte Moderno de Tarragona. Jaime Vidal. (Fragmento).
Reflexión y espontaneidad, dos vías que se pueden elegir a la hora de crear. Rafael Romero ha querido ser espontáneo en sus últimos trabajos. El resultado es una aproximación a las raíces primitivas. En su línea habitual, la reflexión es uno de sus ingredientes.

Revista L’Art. Abril de 1998. Museo de Arte Moderno de Tarragona. Joan Alberich. (Fragmento).
Rafael Romero, presenta una obra de gran fuerza pictórica donde ha dejado de banda la experimentación y la carga conceptual de su época anterior para extraer del fondo de sí mismo toda su sensibilidad y sinceridad: “He humanizado el arte, trabajando sin ninguna razón pictórica.


Cataluña Cristiana. 9/4/98. Museo de Arte Moderno de Tarragona. Miguel Ángel Codina. (Fragmento).
La obra que Rafael Romero expone actualmente en el Museo de Arte Moderno de Tarragona es de una factura esencialmente abstracta. La muestra, bajo el título “Symbolon”, consta de 35 piezas elaboradas en técnica mixta sobre tela. Romero fragmenta la superficie mediante adiciones y superposiciones de unos colores, formas, líneas y texturas sintetizados al máximo. Su proceso artístico no es fruto de la inspiración de un instante, sino que es constructivo y muy meditado. Un trabajo exigente y estimulante.

Texto de Catálogo. Abril de 1998. Museo de Arte Moderno de Tarragona Josep Mariné i Grau. Presidente de la diputación de Tarragona. (Fragmento).
Si el fin último del arte es la comunicación, en esa obra el espectador hallará materiales suficientes como para sentirse anillado a una cadena de emociones: en la luz y en sus reflejos de pintura.


Texto de Catálogo. Abril de 1998. Museo de Arte Moderno de Tarragona José Luis arce Carrascoso. (Fragmento).
Rafael Romero hace alumbrar su intencionalidad de verdadero artista, insiste en su quehacer creador y gracias a la sutileza de su mirada entre texturas y espacios, consigue pronunciar el ensalmo que le abre las puertas interiores. Se han emprendido de los dictados de la mera representación, y, en virtud de la eficacia de indicios cada vez más ingenuos y elementales, su atención se desplaza a espacios íntimos y recónditos en los que no es posible proceder ya con descuidada seguridad.

Tarragona Magazín. Abril de 1998. Museo de Arte Moderno de Tarragona. Ángel González. (Fragmento).
La obra reciente de Rafael Romero se adentra en el entramado que forma el binomio expresión-comunicación en la historia del arte contemporáneo. El sentido final de la colección, apunta también fuera de las mismas obras hacia un territorio donde la comunicación podría ser posible sin intermediarios culturales, mediante el signo desnudo que deviene símbolo en su plasticidad.


Schorndorfer Nachrichten. 17/7/98. Galerie In der Mühle. Schorndorf (Alemania). (Fragmento). Traducción del alemán.
El español Rafael Romero, presenta esta noche su exposición “el camino del sol”, en la galería In der Mühle. Un nuevo encuentro con los iconos sureños de este artista latino ya habitual en los circuitos de nuestro Land.

Revista Kultur Joker. 27/10/98. Galería Schuster. Gelhn Hausen (Alemania). (Fragmento). Traducción del alemán
Obsesiones por la arquitectura de lejanas culturas en la obra de Rafael Romero. Templos del saber, torres imposibles caracterizadas por sus espiritualidades implícitas que emergen en todas las direcciones imaginables.


Texto de Catálogo. Enero de 1999. Salas Provinciales de Exposición. Palacio provincial. Diputación de Jaén. Marisa Guitart Amechazurra. (Fragmento).
El tacto deviene herramienta de contacto y unión con sus obras que con infinidad de texturas, nos hablan en profundidad de energía telúrica y superficialmente de tramas, caminos, carreteras, indicaciones, que no son otros que los de la vida de cada cual. Signos, asperezas, opacidades, y todo un amplio catálogo de invitaciones que hacen del espectador, un experimentador, no sólo de la obviedad visual, sino que también es parte de ese complot placentero en el cual el artista no acaba de seducir solo para que acabemos valorando su obra como si de algo próximo se tratase.

Texto de Catálogo. Enero de 1999. Salas Provinciales de Exposición. Palacio provincial. Diputación de Jaén. Silvia Alcalá Sola. (Fragmento).
La pintura de Rafael Romero es intrínseca a la noción de espacio y vida que posee el artista. Estos conceptos se perciben en las formas y siluetas de vivencias perdidas en viajes desbordantes de imágenes y de color. El artista simula el trabajo de los chamanes de las tribus africanas que con gran sabiduría y determinismo ejercitan la magia contundente de remedios y pócimas en la elaboración de una medicina o remedio primordial, oxígeno, estados esenciales que categoriza la complejidad de su mundo. La materia vínculo entre la naturaleza y la pintura une dos formas de entender el entorno y los mundos paralelos que de ella se desprende, es en la arena, tierra no sólo del “Sur”, sino de Estambul, de África, donde el altruismo del símbolo define el interior del concepto y la percepción intelectual del lugar.


Texto de Catálogo. Enero de 1999. Salas Provinciales de Exposición. Palacio provincial. Diputación de Jaén. José Luis arce Carrascoso. (Fragmento).
Una larga experiencia le avala como pintor, y toda su trayectoria vital nos presenta a Rafael Romero como una persona entrañable, extraordinariamente dotado para captar y expresar los conceptos verdaderamente importantes, tanto como para sentir las emociones más íntimas y plasmarlas con un estilo único que nos obliga a contemplar cada uno de sus cuadros con una mirada que se adentra en sus entrañas para aproximarse al origen intencional de donde procede la infinita variedad de sus composiciones.

Gelnhauser Tageblatt. 4/7/99. Galerie In der Mühle. Schorndorf (Alemania). (Fragmento). Traducción del alemán.
El pintor Rafael Romero, Badalona, 1967; rememora en las raíces de su querida y tan presente Andalucía, las profundas huellas del pasado. Una Andalucía con aires árabes que por derivación nos dirige a otras tantas pasiones, hacia el sur y el este siempre. De oriente medio a Anatolia pasando por Damasco y acabando en cualquier cafetín de su tan bien conocido Karachi.


Schorndorf Aktuell. 28/4/2000. Galerie In der Mühle. Schorndorf (alemania). (Fragmento). Traducción del alemán.
Con una importante impronta mística, incluso romántica, el artista español Rafael Romero presenta su nueva serie titulada “casa de fuerza”, a raíz de una de sus habituales incursiones a Turquía, su segunda patria, en la que encuentra motivos poderosos, una vez más, para seguir insistiendo en el descubrimiento del hombre y del mundo.

Rafael Romero y la Voluntad de Aventura. Barcelona, Junio de 2003. José Luis Arce Carrascoso. (Fragmento).
Nuestro artista ha vuelto a repensar el paisaje como elemento inagotable de inspiración, hasta granar, como fruto de un pensamiento esencialmente nómada, en una nueva narratividad. Por esta línea se encuentran algunos de sus últimos trabajos que han aparecido tras un “lapsus”de reencuentro del autor consigo mismo, porque solamente es el momento en el que el “yo” se reconquista en su autenticidad, y se reconcilia consigo mismo, puede alcanzarse la madurez. Es esto precisamente lo que ahora podemos ver en sus últimos cuadros, asombrándonos con la pintura en todo su esplendor: al fin, es posible moverse definitivamente con libertad por los ideales horizontes del arte, ofreciéndonos el ejemplo de un ejercicio indomable de voluntad que no se ha doblegado a ningún canto de engañosa sirena.



This is the world. Marzo de 2005. Hans Horsch. Hamburgo (Alemania). Fragmento traducido del Alemán.

El mundo en definitiva, es visto por Rafael Romero como un foro permanente de cultura en el cual el artista deja de ser un ajeno y frío observador del mismo, para devenir ente activo y participante en su representación. Así su trabajo This is the World, no es más que un viaje de búsqueda intelectual de las ricas diferencias culturales del mundo. Una vez acotada la diferencia con precisión cientifista, a través de la ilustración y la experiencia, como haría Humboldt, se dirige a lo poético y ensoñado como hicieron Gauguin, Derain, Miró, Saint-Exupery, Borges o Stendhal ante lo que les aportaba el mundo de los otros para hacerlo latente sumando lo propio, creando numerosos contrastes y encuentros culturales en los cuales la imagen de la realidad se articula a manera de fotocomposición, mostrando personajes, lenguajes, símbolos e ideas pertenecientes a diferentes culturas y pensamientos del planeta. Su mirada, en gran medida antropológica, romantiza los iconos expuestos, eternizándolos mediante el recurso del contraste, algo propio de la naturaleza del mundo y su complejidad. La obra, deviene entonces un monumento sumativo de voluntades y a veces de contrariedades, bajo una apariencia de misterio que lleva irremediablemente a la conceptualización. Todo ello, no es más que el fruto de la agitada peregrinación vital del artista. Tal y como señala Pablo Neruda: La vida es una larga peregrinación que siempre da vueltas, que siempre retorna al bosque austral, a la selva perdida. A partir del conocimiento de estos últimos trabajos, animo para concluir a Rafael Romero para que siga invitándonos con tan excelente exposición de propósitos a la reflexión con respecto a quienes somos y qué queremos en este complejo y curioso mundo, sistema en el que vivimos, subsistimos y sobrevivimos. Reconozco y confieso que hacía tiempo que la obra de un artista no me resultaba apasionante, al menos la suya, ha conseguido darme algo que yo personalmente le pido al arte, alimento mentis, alimentar mi mente. Gracias Rafael por el festín y por ayudarme a corroborar una vez más que el mundo y el hombre son obligados objetos de conocimiento no solo para el artista sino para todos nosotros.

This is the world

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Dice el artista...
"This is the world"

Reflexiones icónicas sobre la complejidad del mundo: Nomadismo, Alteridad y transposición en la praxis del Arte.


El Arte, auténtica entelequia, en cuanto a lo difícil que resultó, resulta y resultará sin duda su definición, dispone de recursos prosaicos y amenos que lejos de lo excesivamente formal, conceptual y semántico le sitúan en un axioma, cuya naturaleza es propia del sentir y de la emotividad íntima e irreducible de la condición humana . El concepto no menos difícil de definir llamado sentimiento , a veces emotividad, introafección, las endopatías en definitiva, son territorios en los que el arte arranca alquímicamente y en los que quienes lo amamos, lo practicamos y lo tenemos como una esencia universal, sin la cual el ser deviene inconcluso, encontramos nuestra casa, hogar, refugio, templo, cubículo cósmico del cual debemos irremediablemente partir desde un afán de auto-exaltación, bagaje experiencial, habitualmente trasgresor que culminará en una concreción expresiva, comunicativa y provocativa llamada Obra de Arte .

Lejos de retóricas, necesarias, pero quizás secundarias, el orden urgente al que debiéramos confinar al arte, tendría como axioma primigenio, esencial y fundamental al propio hombre y su capacidad sensible. Urgente además en cuanto a que los tiempos que nos tocan vivir son tiempos de “ética light” , de tedio , incluso nihilismo en los que la fenomenología humana como objeto de conocimiento lamentablemente apenas si nos alienta y esperanza en su particular experiencia vital, a diferencia de aquellos tiempos idílicos en los que en forma de humanismo más racional y empírico o más intuitivo y emocional, suponían una invitación a experienciar la vida pasionalmente.

Así el arte, a partir de las experiencias ilustrada y romántica defendió unidireccionalmente al hombre y sus auténticas realizaciones desde valores pasionales y sensibles, y así lo hizo hasta la actualidad desde la complejidad del arte contemporáneo, el cual ha tenido siempre presente que la esencia del arte se encuentra en el individuo y en los sentimientos de este y que todo ello dirige sus actuaciones hacia la concreción u obra que no es más que una honesta y sincera categorización sensible de la fenomenología humana y una excelente oportunidad de acercamiento al mundo y con todo ello, al conocimiento. Merece la pena insistir en ello por parte de la teoría y la praxis del arte en nuestro tiempo y contexto, pues si el arte ha sido en los últimos doscientos cincuenta años elemento humanizador y cultor del mundo, hoy parece ser una dimensión endémica en un mundo en el que como categoría queda renegado a un segundo término. Es cierto, la sociedad moderna, deviene cada vez más una sociedad desestructurada e indiferente como señala Girard en su análisis del fenómeno, según él, hemos llegado a “Un estado de indiferenciación relativa nunca antes conocido” . Algunos lo ven como consecuencia del neoliberalismo y la globalización de la economía capitalista, pero lo cierto es que el fenómeno es mucho más complejo y en él intervienen innumerables factores.

A nosotros, nos interesa la consecuencia, y esta es, que el individuo esta quedando cada vez más despojado de su capacidad emancipatoria, de su identidad nacional, religiosas, de parentesco e incluso de su libertad sentimental y cultural. El hombre es sujeto subordinado a un mundo entendido como un conjunto de esferas de producción y cada vez más las relaciones que sostiene con su entorno se confunden casi con las relaciones mercantiles y laborales. Su mente, además, establece códigos de relación con todo desde valores prioritariamente de obtención y posesión, un reflejo claro del mundo-mercado en el que vivimos . En consecuencia, hombres y mujeres de hoy, se distancian cada vez más de sus internos paisajes mecidos por mano ajena convirtiéndose en ignorantes con respecto a su mismidad: es lógico, la proyección humana es mecanismo mucho más rentable en el tipo de sociedad en la que vivimos, que la introspección, mucho más lenta en producir beneficios económicos.

He aquí que el artista debe categorizarse en una urgente redimensión siendo consciente de su particular percepción de la fenomenología del mundo y conocedor a la vez de un potencial capaz de ayudar a rehumanizarlo todo desde la defensa de la emotividad y su naturaleza impulsora , territorio que por ser practicado incansablemente resulta bien conocido y deviene medicina nectárea para esta pandemia, macro-enfermedad social del hombre. Y esa categoría debe ser la de la defensa del arte como un nomadismo. En primer lugar como una lucha de superación alejándose de todo aquello que lo limita: lo sedentario supone la aceptación de los límites, lo nómada saltárselos. En segundo lugar como una axiología, en cuanto a que alejado de los límites, los enjuicia, momento en el cual se produce un nuevo pensamiento, conocimiento, y en consecuencia una determinada cultura alternativa a este generalizado sistema pesimista y descorazonado al que se encuentra.

El pájaro rompe el cascarón, el cascarón es su mundo. Quien quiera nacer debe romper su mundo. (Herman Hesse)
A veces el mundo se nos cae. Entonces, desesperados, lo inventamos de nuevo. (Eduardo Fracchia)

La experiencia de la Postmodernidad de finales del siglo XX, resultó muy alentadora en este sentido, aunque poco válida ya que resultó ser mucho más individual que social y por lo tanto su dimensión mucho más anónima, íntima y silenciosa, servidora por tanto parcialmente de la sociedad. No obstante, el artista motivado en el intento nómada de principio de milenio, entre los cuales humildemente me sitúo, aprendió del precedente postmoderno en cuanto a que este le sirvió de estímulo desde sus premisas, genéricamente propuestas de defensa de la pluralidad, de consideración de versiones y visiones diversas sobre el mundo, pero sobretodo por el valor quizás más destacable del pensar y actuar nómadamente: desregularizar las normas de la complejidad caótica y multidimensional.

En este contexto, brillaron con luz propia, entre otros, Gastón Bachelard y su defensa del fenómeno creativo como resultado de individualidades y no de sistemas de arte; Jean François Lyotard y su teoría del rechazo a cualquier metanarrativa o narrativa exterior a la propia esfera de competencia de una disciplina en cuestión. Derrida, en el mismo contexto postmoderno aportó su particular visión, criticando la obsesión histórica que tuvo tradicionalmente la filosofía en convertirse en logocéntrica, cuando él opinaba que la racionalidad por su complejidad era simplemente heterogeneidad; deconstrucción en definitiva consistente en destapar y dejar al descubierto las paradojas de la lógica a lo largo de la historia. También Jean-Paul Dollé, hizo por su parte una interpretación del pensamiento occidental como una filosofía de lo abstracto, universal e inteligible. Para indagar al ser, propuso otras vías alternativas a la filosofía como podrían ser la poesía o el mito como metodologías necesarias para el redescubrimiento del mismo . También Gianni Vattimo, alertó sobre el pesimismo en el individuo contemporáneo por él definido como un sujeto débil, de vagabundeo incierto, inseguro, acrítico, amnésico, sin criterios ni fundamentos, experimentado en el error y desinteresado por lo fundamental, carne de cañón, fácilmente manipulable por el poder político, mediático o ideológico. Su apuesta fué la de estetizar todo en la vida, intentando gozar de lo nuevo e imprevisible a través de un vagabundeo cultural. Así, este individuo, según él, se convertiría en un recolector de hechos culturales e informaciones en busca de su autosatisfacción .
Y como no, Deleuze, en el mismo sentido y contexto preconizó su pensamiento horizontal, o también denominado pensamiento nómada , un pensamiento que no se refugiaba en ninguna esencia, principio, fundamentos o criterios de objetividad, que intentaba mostrar aquello que escapaba al modelo ideal de la razón moderna. Este, en armonía con otro pos-estructuralista abanderado del planteamiento postmoderno como es Félix Guattari desarrollaron las teorías de la rizomática y el esquizoanálisis, invitaciones a la praxis del debate disciplinario e interdisciplinario que pudieran aportar desde el contraste reflexivo nuevos problemas, nuevas posibilidades, nuevas combinaciones que sacaran al pensamiento de su imagen dogmática para convertirlo en algo fresco, en una revolución de la forma que procediera sin la menor duda de una intencionalidad nómada (algo muy presente en la teoría y praxis del arte contemporáneo).
Sustituid la anamnesis por el olvido, la interpretación por la experimentación. Encontrad vuestro cuerpo sin órganos, sed capaces de hacerlo, es una cuestión de vida o muerte, de juventud o de vejez, de tristeza o alegría. Todo se juega a ese nivel. (Deleuze, Guattari) .
Toda esta dinámica defensa de la emotividad experiencial y de desregularización de los paradigmas impuestos, vio también en la Gestalt un puntal fundamental en el sentido de lo que aquí defendemos: el impulso experiencial humano parte siempre de la necesidad. Siempre algo en el entorno o dentro del hombre le llama, y así desde la necesidad se lanza en una búsqueda, a través de la cual se produce una respuesta organísmica y se inicia el retorno al equilibrio homeostático satisfaciendo la anterior necesidad. Para ello, este desarrollará una mecanismo de identificación de las sensaciones, lo que permite el diseño, consciente o no consciente de una estrategia de acción, en la que se establece el contacto o relación con el entorno para satisfacer la necesidad. En conclusión se consigue o intenta conseguir de esta manera el equilibrio homeostático.
La queja que se viene observando genéricamente en todos estos autores viene siendo la misma: Ante una desconfianza en el mundo y en la sociedad que rige al hombre, este, movido por sus sentimientos de insatisfacción y esperanza, se esmera en la búsqueda de fórmulas resolutivas. Es por tanto un nómada que se aleja de lo hasta ahora conocido para procurar valientemente, nuevas perspectivas.

Nuevas perspectivas con un sano fin, altruista fin, servir al mundo para mejorarlo, eso sí, desde la perspectiva constante de la trasgresión. Pensamiento nómada endopático, Arte Nómada, sentimientos que trasponen el interno y empujan al practicante de esta apasional entelequia hacia una proyección de su mismidad en una dimensión de conocimiento innumerable e inimaginable. En los principios existenciales del artista se hace necesaria pues toda esta sana rebeldía cíclica preconizadora de la mutación y defensora de la micro-historia, toda esta búsqueda vital alentadora para él y para los demás le lleva a considerar el tiempo y el espacio como dimensiones categóricas a través de las cuales dirigirse a otras sociedades y culturas , a otros fenómenos desde su anhelo de lo lejano y lo distante. En ocasiones basta con la simple ruptura con la limitación, a veces, todo es tan sencillo como una praxis ontológica: La proyección y realización del Yo. El talante nómada artístico, impregnación anímica, dinamismo existencial, universo introafectivo ilimitado, mecanismo procesual de traslación terapéutica, adaptación hacia lo ajeno y hacia el otro, voluntad humana de autoimpulso y de resistencia, autoexilio, viajes hacia el interior, concepción trágica de la existencia...Idealismos en definitiva que son un sistema de vida o de reflexión y que suponen en mayor o menor medida de temporalidad la relativización del hábitat cultural propio y culminan cuando se crean nuevos experienciales y experimentales o se recuperan los primigenios asumiéndolos tal y como son o transformándolos desde lo aprehendido: El noble fin del artista es liberarse y liberar al hombre de su ignorancia.

El nomadismo convierte por tanto al artista en alguien que lucha por superar el obstáculo, y lo hace estetizándolo todo, emotivizándolo todo en procesos de enfrentamiento, cuestionamiento, revulsión, paliación, enrancia. Naturalezas atemporales y espaciales que se enfrentan en definitiva con empeño a las cada vez mayores limitaciones contextuales.

Militante de la política interior del ser humano y de sus magnos silencios y convencido en que la errancia por el mundo es experiencia en primer lugar “cultora” y en segundo lugar, y como consecuencia de la primera, experiencia “liberadora”, mi particular defensa del arte se dirige pues a la reivindicación de la emotividad como su motor impulsor y al nomadismo como hecho experiencial ontológico. He aquí pues que decidiera iniciar este particular viaje de observación rigurosa del mundo, convencido de sus infinitas posibilidades, estetizando o emotivizando todo lo que alcanza mi mirada a través de múltiples experiencias, desde el viaje como fuente indiscutible de conocimiento, pasando por la alteridad, o asimilación de los valores, hechos y fenomenologías del “otro” y en fin, valorando los más ínfimos recursos y posibilidades que el mundo esconde y pone a nuestro alcance. Las iconicidades que se presentan bajo el título “This is the world”, teatralmente, una presentación del mundo, en el lenguaje del mundo y a la vez un enigma para el mundo, son, así lo intuyo, en este momento de consistente arranque para mí, un territorio delicioso de impregnación anímica que me complace presentar para compartir desde mi más modestas pretensiones: reivindicar hasta la saciedad al hombre y defender el arte como sublime experiencia, medicina nectárea para tiempos difíciles.

Rafael Romero.